Hola mi mami amada! Mucho tiempo sin contestarte, disculpame, no es porque no las recuerde, al contrario, siempre estoy con ustedes. Sucede que aquí nunca estoy quieta, no puedo contarte, sólo decirte que es hermoso hacer lo que hago porque estoy creciendo tanto... y a veces dejo de hacer estas cosas como es escribirte a vos, mi mami de la tierra, mi mami del alma.
Veo que estás un poquito mejor y eso me tranquiliza. Me contaste en la anterior que a veces te tienta el maligno, no tengas miedo mami, lo que hacés es justo lo que se debe hacer, invocar a la Virgen María, y verás que siempre salís de esa mala tentación. Yo sé que vos no me vas a fallar, porque vos me prometiste esperar a que el Padre te llame y yo te prometo que estaré allí esperándote para llevarte de la mano por los caminos de Dios, como dice la poesía de San Agustín. Si supieras lo cierto que es todo lo que dice el santo en ese poema...
Veo también que Nanita está con muchos planes y también mejora en muchos aspectos, eso me alegra mucho y decile que siempre que me necesite me llame que allí estaré. ¡Cómo no voy a estar al lado de mi hermanita amada, que yo tanto le pedí a la Virgen para que viniera al mundo! Siempre estaré cerquita suyo y decile que la amo profundamente.
Por último te cuento que tanto los abuelitos como el tío Pachi están siempre conmigo y te mandan ellos también muchos besos, a vos y a Nany. Te cuento también que Ele está bien y que siempre está ocupándose desde acá de sus hijos, con ella aprendí que las madres no dejan nunca de ocuparse de nosotros los hijos, está siempre atenta a todo lo que les pasa y solo espera que sigan teniendo fe todos en su familia para poder estar más cerca de cada uno. Porque sabés mami que esta comunicación que vos y yo tenemos tiene que ver con la fe, sin ella nada de esto sería posible, si vos no tuvieras fe nunca podríamos comunicarnos de ninguna manera y eso ocurre con todas las personas. Dios quiere que todos tengan fe, que todos crean sin ver, porque para eso fue Jesús al mundo como hombre, para dejar entre otros ese legado de fe.
Mamita por hoy te dejo, pero igual sigo a tu lado. No dejes de seguir tomando la medicación que te hace bien y no dejes de tener fe vos también. Dale un abrazo enorme a mi querida hermanita y para vos otro igual y un gran beso de tu hija mayor que te sigue amando como siempre. Noé.
Psdta. Te dejo una imagen de Jesús con algunos de los chicos de Aquí.
