sábado, 17 de abril de 2010

POR QUÉ?

Noé, hija mía, te extraño mucho, cada noche, cada día a distintas horas aparecen recuerdos de tu vida aquí y lamentablemente siempre vienen los feos, los de la enfermedad maldita, y hago entonces un esfuerzo para retirarlos de mi mente y llevar mi pensamiento a tus días de felicidad, a tu infancia tan amada. Tu infancia... mi amor, cómo disfruté tu infancia... Aquellas tardes cuando te reunías con Cintia, Silvana y Andrea y yo les preparaba chocolatadas con tortas o masitas. O aquella vez que prepararon una función con obra de teatro incluida y vino el abuelo César con una tortita para servir luego y Chiquita con masitas y la mamá de Silvana con unos canapés y también la abuela Celia con algo, no recuerdo, armamos un pequeño teatro en nuestro patio y unas hileras de sillas sirvieron para el "pùblico" invitado especialmente. Qué hermoso día, qué bien lo pasamos y qué feliz fuiste y también lo fueron tus amiguitas. Esas cosas mi amor quedaron grabadas a fuego en mi memoria y pienso siempre y pensar que no me imaginaba que ocho o nueve años después te iriías, partirías hacia el infinito, al Cielo, adónde Noé? Adónde estás ángel mío, tan mía, tan mi nena amada, mi primera hija, mi sueño realizado, por qué, por qué Dios quizo esto para nosotros? Por qué fuiste vos la que tuvo que irse? por qué? por qué? POR QUÉ DIOOOOOOOOOOOOS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!