miércoles, 3 de noviembre de 2010

YA ESTÁ AQUÍ MAMITA...

Ya está aquí mami, ya lo trajo el Padre, ya pude conocerlo y saber más de él y ahora que lo tengo cerquita y lo veo cómo es me doy cuenta por qué tanta gente lloró cuando partió hace una semana de la vida terrenal.
Mucha gente lo rodea a medida que camina y se asombra de todo lo que ve, pero como nos pasa a todos está muy preocupado por cómo está su familia y todos ustedes allá, entonces hace lo que también hacemos todos, baja a cada rato y está allá y se mete entre ustedes y no lo ven, pero muchos lo sienten, como vos me sentías y me sentís a mí todavía mamita.
Ojalá todo el mundo tuviera tu fe, cuánto menos sufrirían por los que el Padre nos llama a veces más temprano que lo esperado, pero son los designios de Dios y sólo Él sabe y conoce por qué es así. Luego cada uno sabemos por qué lo hizo con cada uno de nosotros y cuáles fueron nuestras misiones, podemos contárselas a quienes queramos, pero siempre que ya hayan subido hasta aquí, no antes, no cuando todavía están allá, como vos ahora; porque es gracias a ese análisis que ustedes hacen sobre el por qué de nuestra partida del mundo es que muchas veces pueden cumplir ustedes sus propias misiones. No todos se dan cuenta de esto y por lo tanto no pueden terminar sus misiones como el Padre lo tenía previsto, pero es muy importante cumplirlas, si lo hacemos, es más fácil y pronto la llegada final y concreta a este mundo celestial que nos regala nuestro querido Padre.
Jesús y María también lo recibieron como lo hacen con todos nosotros y él se abrazó con su padre muy fuertemente, es muy emotivo mami cuando lo vemos y es en esos momentos, quizás los únicos momentos en que uno siente que quiere pasar por lo mismo pronto, abrazarse con los que dejó allá, pero enseguida entendemos que eso también lo decide sólo el Padre y que ese día llegará solamente si sos una buena persona y amás a tus semejantes.
Mamita, yo estoy segura que vos y yo nos encontraremos y nos daremos ese abrazo que tanto deseamos las dos, pero no sé cuándo será, Jesús sí lo sabe, pero nosotros sabemos que no tenemos que preguntarle eso, Él es tan dulce que cuando se nos escapa la pregunta sólo nos mira con una ternura infinita, nos acaricia la cabeza y nos dice que esperemos, que ya llegará el día y entonces yo por lo menos siempre me abrazo con Él porque lo amo profundamente y porque recuerdo cuánto lo amaba ya allá en la tierra y me siento feliz de poder abrazarlo ahora como tanto lo deseaba allá, y me alegro de no haber dudado nunca de Él porque eso Él lo sabe y lo pone más feliz aún. La fe mamita, la fe y el amor a tus semejantes, eso es lo que más valora Jesús.
Bueno, por hoy te dejo, quería darte esa noticia que sé pensabas todos los días, era un hombre bueno, vino muy pronto, se nota que el cuestionario lo pasó muy rápido y no hubo mucho tiempo de purgar pecados. Ahora como todos nosotros ya está en completa gracia de Dios, no lo llores más y tampoco me llores más a mí, porque todos estamos bien y felices en la Casa del Padre.
Ya sabés que te amo, pero vuelvo a decírtelo y te doy simbólicamente el abrazo que soñamos. Dale de mi parte un abrazo y un beso a Nanita y decile que ya le estoy pidiendo a Jesús para que se mejore prontito, que se quede tranquilita y haga reposo nada más, Jesús hará el resto. Te quiero con todo lo que soy mamita mía, un alma en el Cielo. Tu hija mayor. Noé.