miércoles, 2 de noviembre de 2011

Por qué?





Hola mi nena amada, te quiero mucho sabías no? No vengo muy seguido pero vos sabés que no pasó ni un sólo día desde tu partida que tu mamita no haya pensado en vos, y no sólo una vez, varias veces al día, cuando no todo el día. Vos sos mi luz en el Cielo, mi Ángel, mi futuro... Tu luz me guía Noé, hija mía, tu recuerdo me acompaña y tu carita está presente en todo momento en mi mirada, en la retina de mis ojos. No olvido jamás tus inmensos ojos negros, razgados hacia abajo como los de los árabes, mi turquita linda, como yo te decía. Qué linda eras mi nena adorada. Y cuando eras chiquitita... ayyy... qué bonita eras! Una verdadera muñequita, dulce y primorosa. A mí me encantaba vestirte como una de ellas, llena de puntillitas y voladitos y a vos te encantaba también. Siempre te vestía toda combinadita en los colores, y siempre con lindos zapatitos o zapatillitas. 
 Me acuerdo que cuando eras más bebé y tenías todavía cortito el cabello, te ponía una hebillita con forma de corazoncito rosado, y quedabas más tierna aún si es que eso era posible.
 Además eras tan cariñosa y tan mimosa, siempre abrazándonos estábamos y dándonos besitos y jugando y riéndonos. Todos los recuerdos a tu lado son bellos mi amor, por supuesto que exceptuando esos últimos cuarenta y dos días de tu vida aquí en el mundo que nunca debieron existir y que cuando vaya al cielo si Dios quiere, espero que Él mismo me explique por qué, por qué y mil veces por qué sucedió, si era Su designio, si fue algo con lo que Él no podía luchar, si fue porque la vida es así nada más, no lo sé, no sé por qué te fuiste de mi lado Noé hija mía, me lo voy a preguntar hasta el último instante de mi vida, no sé por qué en este momento en vez de estar aquí sola escribiendo esto, no estoy con uno o dos de tus hijitos, de mis nietitos adorados, a quienes yo cuidaría con amor si vos tenías que trabajar o estudiar, no sé por qué tuviste que irte vos, cuando podría haber sido otra chica, cualquiera no sé, pero por qué vos, mi hija, por qué Dios!!
 Ya dejo mi amor, porque me estoy poniendo muy triste hoy, no sé qué me pasa que ando muy triste últimamente y te extraño más que nunca. Quiero seguir creyendo que estás en algún lado y que estás bien y me ves y me escuchás y ves todo lo buena que trato de ser para poder reencontrarme con vos. Si en algo no lo soy o fallo, hacémelo ver de alguna manera así lo corrijo y no corro el riesgo de no poder verte nunca más. Te amo Noé, mi hija amada, la primera, mi primer amor de mamá. Te amo como siempre, más que siempre y te extraño muchooooooooooooooooooooooo........................................




NOTA. Obra de Alejandro Costas. El más largo y sinuoso de los Caminos.



3 comentarios:

  1. Nunca viví algo parecido. Me lo imagino. Pero no tengo la experiencia. Me parece, aunque no lo sé a ciencia cierta, que tu hija te escucha desde algún lugar. Seguí poniéndole escaleras para que se sienta tentada a comunicarse con vos. Un beso enorme

    ResponderEliminar
  2. Gracias Lina, mirá vos casi dos años después leo tu comentario, es que dejé los blogs abandonados, el face me fagocitó.

    Sí, yo también creo que me escucha, que me ve, hasta a veces la siento cerca, sólo espero el momento de reencontrarme con ella. Gracias y un abrazo grandote antigua amiga bloguera, hoy facebuqueana y lo más importante leal militante kirchnerista!!

    ResponderEliminar
  3. Hola Melan. Yo lo llamo sincronicidad. Por ejemplo, estaba leyendo el blog de mi amigo Mario y vi un comentario tuyo y me metí en tu blog y vi tu "Escalera al cielo" porque hice una escalera al cielo en mi rancho, que mira al oeste, como la canción, para recordar el último cuadro que pintó Juli antes de morir... y ahora mismo mientras escribo veo un dibujo de una mariposa, que es Juli, así la llamé, Mariposa Patasucia porque siempre andaba descalza y libre. Y para darle un "para qué" a estos eventos que sólo los que los vivimos lo sabemos, te digo que no hay un "por qué", sólo una serie de "para qués" que, a veces, sólo a veces, se nos permite entrever. Noe y Juli están bien, muy bien.

    ResponderEliminar